En este encantador libro-álbum, un ratoncito, Chico Canta, salva a su familia del pequeño pero astuto Gato-Gatito, gracias a su agilidad mental y su conocimiento de otro idioma.
Chico Canta, el menor de doce hermanos, es un ratoncito travieso y temerario que vive con su familia en un viejo teatro. A todos les encanta subir al palco. Desde allí miran los espectáculos y luego gritan, “¡Bravo, bravo!” con el público, cuando cae el telón.
La señora Canta vive arreando a todos sus hijos de un lado a otro, y a Chico en particular. Siempre les dice: “¡Pronto! ¡Pronto! Hurry! Hurry!” Ella habla muchísimos idiomas: español, inglés e italiano, pero también araña, grillo y polilla. También anima a sus hijos a desarrollar sus propias capacidades lingüísticas: “¡Bravo, bilingüe!” les dice siempre.
Una noche, después de una maravillosa puesta en escena de Los tres cerditos, la familia de ratones está a punto de caer entre las garras del Gato-Gatito. Una vez superado el susto, los ratoncitos se animan a montar su propia versión de la obra. Sigue una actividad intensa: el señor Canta supervisa la costura de los disfraces y la construcción de la escenografía, mientras la señora Canta dirige a las grillos músicos, a las arañas escenógrafos y a las polillas acomodadoras del público. Pero cuando al fin llega la noche del estreno, la verdadera estrella resulta ser Chico Canta. Desde la escena, el ratoncito detecta al Gato-Gatito en la sombra y enseguida utiliza su maravilloso don para los idiomas para evitar el desastre.
Las tiernas ilustraciones de Amelia Lau Carling, reflejan todas las emociones que viven Chico Canta y su familia: sus alegrías y hazañas, sus temores y triunfos. Todo esto, contra el telón de fondo del viejo y elegante teatro.
Una nota de la autora Pat Mora describe cómo ella y su hija Libby escribieron esta historia, inspiradas en un chiste bilingüe que leyeron en un libro de cuentos méxico-americanos.
This is a story that reflects the experiences of children across the world growing up speaking a number of different languages, and the authors create a little character with whom readers can relate.
Food for thought for monolingual mouselings—not to mention their parents and teachers.
Mora and Martinez tell the story with charm and ease; Carling’s illustrations are bright and appealing, with just enough detail to captivate young audiences. The story makes bilingualism equally appealing, offering the message of language education with subtlety and humor.
Carling’s mixed-media paintings create a cozy Latin American environment for Chico’s family.
This story is a celebration of diversity that invites audience participation and has great potential as a readers’ theater piece for the younger set. Recommended.
Based on a Mexican American folktale, this entertaining cat-and-mouse story features Little Chico . . . who saves the day by using his 'bilingual' talent.